Características Macroscópicas
Cuerpo fructífero (estroma): Emerge del cadáver del insecto, generalmente de forma individual o en pequeños grupos. Es claviforme (con forma de maza o porra) o esbelto, de 1 a 8 cm de altura y de 2 a 5 mm de ancho.
Color: Es muy llamativo y una de sus características más reconocibles. Varía de un naranja vivo a un rojo anaranjado.
Superficie (estroma): La parte superior o fértil del hongo tiene una superficie áspera y punteada. Estos puntos son los ostiolos de los peritecios, que son las estructuras donde se forman las esporas.
Pie (estípite): Es la parte inferior del hongo, que conecta con la larva parasitada. Es más pálido, a menudo de color amarillo o naranja pálido. Puede ser liso o ligeramente furfuráceo (con pequeñas escamas).
Carne: La carne del hongo es de color amarillo-naranja, fibrosa y tenaz.
Hospedador: La identificación de la larva o pupa de la que emerge el hongo (generalmente de lepidópteros) es una característica ecológica importante.
Características Microscópicas
Peritecios: Son los cuerpos fructíferos microscópicos donde se producen las esporas. Son ovoides o globosos, semi-inmersos en el estroma, de color naranja.
Ascas: Son las estructuras cilíndricas y alargadas que contienen las esporas. Son hialinas y no amiloides (no reaccionan con el yodo).
Ascosporas: Son un rasgo muy distintivo. Al principio son filiformes (con forma de filamento), muy largas y hialinas. Con la madurez, se fragmentan en multitud de esporas secundarias más pequeñas y cilíndricas, que miden alrededor de 3-7 µm de largo y 0,7-1.2 µm de ancho. Esta fragmentación es una característica clave para su identificación.
El Cordyceps militaris se ha utilizado durante siglos en la medicina tradicional asiática, especialmente en China, por sus supuestos beneficios para la salud.
Aunque está relacionado con el Cordyceps sinensis (ahora conocido como Ophiocordyceps sinensis), el Cordyceps militaris es el que se utiliza más comúnmente en la actualidad, ya que se puede cultivar de forma artificial en laboratorio, lo que lo hace más accesible y sostenible.
En la cultura popular, el Cordyceps militaris ha ganado notoriedad por su representación en la ficción, como en el popular videojuego y serie de televisión "The Last of Us", donde una versión mutada del hongo convierte a los humanos en criaturas similares a zombis. Sin embargo, en la realidad, el hongo no representa ninguna amenaza para los mamíferos y se consume como un suplemento dietético.
Se ha estudiado por sus posibles propiedades medicinales, incluyendo efectos antioxidantes, antiinflamatorios, antienvejecimiento, y estimulantes del sistema inmunológico. Aunque la investigación aún está en curso, se ha convertido en un ingrediente popular en suplementos nutricionales y productos de salud.








